Cuando hacemos algo solemos hacerlo porque creemos en ello y que es algo bueno. Pensamos en el «happy path», en que las cosas irán bien.
En ocasiones la realidad nos da un zasca y nos topamos con efectos y realidades no deseados de nuestras acciones bien intencionadas:
![](http://localhost/victor2/wp-content/uploads/2019/12/buenas-intenciones.gif)